sábado, 26 de abril de 2014

Las BIBLIOTECAS de la mancomunidad VALLE DEL NALÓN

Recorrer mi Valle. BIBLIOTECAS. 
23  de abril del 2014. DÍA DEL LIBRO. 
BIBLIOTECAS. EL REFUGIO DE LOS LIBROS, EL HOGAR DE LOS LECTORES, EL ESCONDITE DE LOS «LOCOS QUIJOTES», EL SALÓN DE CASA.

Aunque sea mera deformación profesional, parece un «pecado cívico» dejar pasar el día del libro sin un homenaje a nuestras Bibliotecas.  Contamos doce  estables las que hay en este Valle del Nalón que forma la Mancomunidad. Al final las nombramos (si falta alguna se ruega añadirla, no se vaya a sentirse postergada). Algunas instaladas en viejos edificios rehabilitados, otras en otros levantados para la ocasión. A menudo con carencias de personal y recursos, que compensan lo primero con el entusiasmo y la dedicación de los responsables; lo segundo cuidando al máximo las cosas y escarbando para ver de dónde se puede sacar algo más.

Algunas tienen nombres propios hermosos como el poeta de poetas «Federico García Lorca»; el culto rector asturiano «Fermín Canella» o el poeta langreano Alberto Vega (1956-2006); todas tienen el más amable de los calificativos: son «Públicas», abiertas a todos. Uno tiene que sentirse en la Biblioteca como en su casa, y no abandonarla; visitarla con frecuencia, ver nuevas obras y releer las viejas. La Biblioteca como punto de encuentro, de reflexión, de estudio contra el soliloquio del rincón con el ordenador. Las redes sociales están bien. Los contactos personales son insustituibles.

Por seleccionar dos de nuestras Bibliotecas,  una de abajo y otra de arriba de valle del Nalón, nuestro particular Nilo, elegimos la Biblioteca Pública Escuelas Dorado en el langreano distrito de Sama y la Biblioteca Pública Fermín Canella en la localidad de Rioseco de Sobrescobio, siendo conscientes de que todas tienen su pequeña-gran historia.

LA BIBLIOTECA PÚBLICA ESCUELAS DORADO fue un centro pionero inaugurado en 1986, un tiempo en el que se apostaba por dotar a todas las villas asturianas de un buen y bien dotado centro de lectura. A este empeño no fue ajeno –y se le debe reconocer – el empeño del consejero Manuel Fernández de la Cera. Como yo fui parte de aquella realidad de las Escuelas Dorado (y Conchita, que sigue al pie de tan hermoso cañón, y Pilar que se fue tan joven) recuerdo que el presidente Pedro de Silva definió aquel lugar como «el buque insignia de la cultura del Valle del Nalón». Nació como Biblioteca, casa de cultura con salas polivalentes, de exposiciones y salón de actos, en la calle central de la villa, la calle homenaje al alcalde urbanizador del Langreo de fines del siglo XIX.
El edificio de las Escuelas Dorado es una construcción histórica de escuelas públicas, centro de instrucción para niños y niñas, juntos pero no revueltos, con puertas y clases distintas, como imponía el decoro de los tiempos. Fue inaugurada en el lejano 1905 y debe el proyecto a uno de los mejores arquitectos asturianos de principios del pasado siglo, Juan Miguel de la Guardia, el autor de obras tan significativas como la Villa Magdalena o la Casa del Deán Payarinos (hoy Conservatorio) en Oviedo. Langreo era en aquel entonces un concejo importante y como tal tuvo arquitectos importantes.
Sobre aquel edificio se hizo una rehabilitación digna diseñada por Alejandro Alcázar. Era alcalde Aladino Fernández. La Biblioteca estuvo dotada con fondos amplios. Sigue siendo un lugar acogedor.

BIBLIOTECA PÚBLICA MUNICIPAL FERMÍN CANELLA de Rioseco, es de fábrica reciente y está situada en un lugar central de la villa. Nacida ya en época informática (no como la de Langreo) fue inaugurada en marzo del 2011 por el viceconsejero de Cultura Jorge Fernández León, concebida también como telecentro. El alcalde de Sobrescobio, Marcelino Martínez, aseguró que el proyecto «mejorará la calidad de vida de nuestros ciudadanos». Realizada con fondos mineros es un edificio destacado que utiliza como elemento integrador la madera. El proyecto se debe al arquitecto Luis Corte.
Su nombre recuerda a don Fermín Canella y Secades, catedrático de derecho, historiador, cronista, político; un polifacético empeñado en divulgar la investigación y la cultura. Ligado a Sobrescobio que lo nombró hijo adoptivo promovió escuelas en aquel distrito que siempre quiso. Paradojas de  los nombres: el busto de Fermín Canella está en el jardín de la escuela vieja/biblioteca de Soto de Agues.

Son estas nuestras Bibliotecas. En muchas hubo y hay clubes de lectura y tertulias

Langreo
Biblioteca Pública Municipal " Federico Garcia Lorca " de Riaño.
Biblioteca Pública Municipal "Alberto Vega" de La Felguera.
Biblioteca Pública Escuelas Dorado. Calle Dorado. Sama.

SAN MARTIN DEL REY AURELIO
La Biblioteca Pública de El Entrego
La Biblioteca Pública de Sotrondio
La Biblioteca Pública "Aquilino de la Torre" de Blimea

LAVIANA
Biblioteca Pública de Barredos
Biblioteca Pública de Pola de Laviana
Biblioteca Pública del Condao

SOBRESCOBIO
Biblioteca Pública Municipal Fermín Canella de Rioseco
Biblioteca Pública Padre Juan Prado de Soto de Agües

CASO
Biblioteca Pública de  Campo de Caso [ con servicio de Biblioteca Ambulante]

Imagen: Biblioteca Pública Municipal Escuelas Dorado, Langreo y Biblioteca Pública Municipal "Fermín Canella", Sobrescobio.

jueves, 17 de abril de 2014

LANGREO EN EL SIGLO XVII: 16 DE MAYO DE 1647 "En las cassas de Ayuntamiento de la v


No son nuevas las desavenencias entre los poderes locales y los regionales y aún nacionales. La celosa autonomía municipal se remonta al medievo. El Langreo  (y entonces también SMRA) que había comprado su independencia del obispado en el siglo XVI, pero que seguía "tutelado" por el eclesiástico poder, reclamaba orgulloso ante el corregidor-gobernador de Asturias, que por aquel entonces era Juan de Arce y Otalora su capacidad de autogobierno. 
Daba el concejo de Langreo, reunido en las "casas consistoriales de la villa de Sama", su poder a su procurador general Francisco de Argüelles Meres y a su sustituto mediante un documento de autoridad para reclamar los privilegios del concejo y su capacidad para elegir regidores y demás cargos locales. Exigían los papeles que acreditaran todo ello para incluirlos en el archivo municipal y habilitaban a los representantes para emprender acciones judiciales si fuera preciso y se obligaban solidariamente a socorrerlos en los gastos con todos con los bienes propios del concejo.



Este documento con el que me encontré en la serie de Actas Históricas de la Junta General, sirve para muchas cosas. 1) A quienes les interese la historia local para conocer quiénes mandaban en aquel lejano pasado en más de la mitad de nuestro valle: "Francisco del Carpio, teniente de juez en este concejo, Toribio de Argüelles de Meres, Alonso García de Riaño, Domingo Candanedo, Domingo García de Sanmartino, Diego de Vijil, regidores" y Francisco de Argüelles de Meres, procurador general, además de "Bernardo de la Buelga, y Diego de Argüelles y Baltasar Bernardo, becinos deste concejo" además del escribano Domingo García. También aparecen los escribanos y testigos de la capital que recepcionan el poder. 2) Nos sirve para saber que ya en Sama eran estables las casas consistoriales del amplísimo y poderoso concejo langreano que ocupaba el valle desde el límite con Oviedo hasta Laviana. 3) Aporta pistas de cómo ir recuperando los documentos de la historia local de este tiempo, en gran medida en la Real Chancillería de Valladolid, la instancia judicial ante la que debían pleitear los vecinos. 4) La existencia de una práctica documental y un protocolo de nombramiento que demuestra la existencia de una administración compleja o 5) Los límites de los cargos elegidos.

Solo el archivero (primicia nuestra) puede encontrarse con estas pequeñas joyas que, además de transportarle al pasado, le hacen comprender la relativa novedad de un presente que no es tal. Algún día contaremos lo traumático que fue la destrucción a manos de una partida carlista del rico archivo local langreano allá por los años 70 del siglo XIX.

Para quien sienta curiosidad os dejo íntegro el documento:
387 r. En las cassas de Ayuntamiento de la villa de Sama, concejo de Langreo, a diez y seis días del mes de mayo de mill y seiscientos y quarenta y siete años, es- tando juntos los señores justicia y reximiento deste concejo en su Ayuntamiento, como lo tienen de costunbre, especialmente su merced don Francisco del Carpio, teniente de juez en este concejo, Toribio de Argüelles de Meres, Alonso García de Riaño, Domingo Candanedo, Domingo García de Sanmartino, Diego de Vijil, regi- dores, y Francisco de Argüelles de Meres, procurador general en este dicho conce- jo. Y estando ansí juntos dijeron que, por quanto en poder del señor liçenciado don Juan de Arze y Otálora, oydor de la Real Chancillería de Valladolid y goberna- dor que fue deste Principado para la real executoria que este concejo tiene del Re- al Consexo para la forma de elejir los oficios de jueçes y más oficiales dél y ottras cosas, con la qual fue requerido su merced del dicho señor oydor. Y porque su merced está de camino a la ciudad de Valladolid y la dicha executoria conviene te- nerse en el archibo deste concejo, dixeron que, en la mejor ma<nera> y forma que aya lugar de derecho, davan y dieron todo su poder cunplido el qual de derecho se requiere y es necessario, y con cláusula de sostituir, al dicho Francisco de Ar- güelles, procurador general, para que en nombre deste concejo pida y suplique al dicho señor don Juan de Arçe le entregue la dicha real executoria; y no siendo ser- vido de açerlo, se lo pida judicialmente ante el señor gobernador deste Principado. En racón de lo qual aga 387 v. todas las delegencias necessarias que convengan, que el poder que se requiere, ése, le dan y otorgan con todas sus ynçidencias y depen- dencias, anexidades y conexidades, y con libre y general azministración, y releva- ción en forma. Obligáronse con sus perssonas y bienes, y los propios deste conce- jo que abrán por firme todo lo que el dicho Francisco de Argüelles y sus sostitutos en birtud dél yceren. Y lo otorgaron ansí, estando testigos Bernardo de la Buelga, y Diego de Argüelles y Baltasar Bernardo, becinos deste concejo, y la dicha justicia y reximiento, que doy fe conozco. Cometieron la firma al dicho señor ex-juez u a Toribio de Argüelles, regidor.
Francisco del Carpio (R). Ante Domingo García (R). +
En la feligresía del concejo de Langreo, a diez y nueve días del mes de mayo de seiscientos y quarenta y siete años, por ante mí, escribano, y testigos, Francisco de Argüelles de Meres, vecino y procurador general deste concejo, usando del poder de atrás, ya ar<r>iva contenido, de la justicia y regimiento deste concejo, le sostituyó para todo lo en él conteni/388 r.do en Antonio Lavilla, escribano del número de la ciudad de Oviedo, y en Domingo Roxo, y qualquiera dellos ynsolidun. Y obligó los vienes a él obligados y lo otorgó ansí el otorgante a quien yo, escribano, doy fe conozco. Y lo firmó de su nombre estando testigos Diego Argüelles, y Antonio García y Juan Gutiérrez Bernardo, vecinos deste concejo.
Francisco de Argüelles (R). Ante Domingo García (R).
En birtud de este poder y sostitución recibí la carta executoria que contiene en veinte y una ojas y lo firmo. Obiedo y mayo, veinte y dos de mill y seiscientos y quarenta y siete años.
Domingo Rojo (R)./
388 v. Langreo. Recivo de la executoria de Langreo./

FUENTE: Documentos de las Actas Históricas. Junta General. Archivo Histórico de Asturias. Fondo Junta General.

martes, 15 de abril de 2014

EL VACÍO

EL VACÍO. El llegaba en el avión de última hora y como estaba nerviosa ella llegó casi una hora antes. Cuando aparcó el coche los autobuses se iban con los viajeros del penúltimo vuelo. Y algunos hombres de negocios preferían los taxis que aguardaban en fila. Pocos clientes para muchos taxis. Pero aún quedaba un último vuelo... Y ya no había buses.


Cuando entró en la terminal el bar secundario de llegadas estaba cerrado; apenas un par de mostradores de coches de alquiler y de reclamaciones tenían luces. Las dos chicas uniformadas se aburrían esperando el final de la jornada; una revolvía papeles en su puesto y la otra en el de al lado bebía agua mientras recogía. Los pasillos estaban vacíos y las tiendas cerradas. Los letreros luminosos y los anuncios-película se adueñaban del espacio. 

En un sitio así una camina no queriendo oír sus pasos para poder escuchar los pensamientos que se amontonan aprovechando el espacio dejado por el vacío acústico:

"¿Por que me habré metido en esto?"- pensó. "Realmente tengo una vida cómoda, tranquila, sin alteraciones..; apenas conozco a este señor que va a llegar.¡Con lo que me costó volver a vivir sola! ¡Menos mal que se irá en una semana! Entonces recuperaré la rutina. A lo mejor me compro un perro..."

Mientras pensaba así se adentraba por el pasillo más oscuro y se ensimismaba más. Entró en el baño y la luz poderosa la flaseó sacándola del soliloquio. Recordó que cuando le conoció, apenas un par de meses antes, estaba tristísima y se sentía sola. Entonces fue un revulsivo, un despertador. La ayudó a sonreír otra vez. Se miró a los ojos en el espejo y pensó que los días próximos podían ser una buena oportunidad para comprobar si era posible recobrar la alegría. No se trataba de planear ninguna relación futura, ni siquiera una relación, sólo ver si era posible convivir con alguien más que con su piedad.

Cuando salió del baño ya había gente que también esperaban. Algunos tenían cara de cansados; otros parecían ilusionados por encontrarse con el padre, el novio, la novia o el amigo, hermano o primo lejano que volvía después de tiempo. Ella no compartía aquellos sentimientos, pero de repente se alegró de estar esperando por alguien...







domingo, 6 de abril de 2014

PUESTA DE SOL



La luz de aquel atardecer de verano le pareció particularmente luminosa. Detuvo  la lectura que la tenía ensimismada para observar la puesta del sol detrás de los tejados viejos de la ciudad.
Muy lentamente las sombras iban ganando. De pronto el dolor de huesos se apaciguó recordando otras tardes de verano de su lejana juventud. Unos amigos, una guitarra, un recóndito lugar al borde del río; allí donde se formaba una pequeña piscina natural que hacia las delicias cuando apretaba el calor. Y la luz del atardecer entre los árboles era, pese a los años y el marco, tan parecida a esta que la hizo recuperar gratas sensaciones olvidadas y olvidar ingratos dolores. Pasó así un buen rato. Un músico callejero tocaba en la calle "O sole mio". Cuando abandonó la terracita, sumida en sombras, pensó: " debo valorar más el tiempo de hoy; solo de ese modo recobraré lo mejor del ayer y dejaré de temer el mañana".


Agosto del 2013

sábado, 5 de abril de 2014

Recorrer mi Valle. LAS POLAS. Una mancomunidad medieval.



Algo así fue lo que pasó entre finales del siglo XIII y el siguiente siglo. El poder real y a su imitación el señorío eclesiástico de la mitra ovetense intentaron que el territorio del Nalón tuviera una serie de puntos importantes donde hacer puebla, crear un mercado periódico, instituir una administración, organizar la seguridad de los caminos, promover la construcción de puentes; en definitiva estructurar el territorio.

La parte alta, el amplio concejo de Caso, paso hacia León, permaneció ligado a señoríos laicos cuasi feudales; las diversas ramas de los Caso con solares en las antiquísimas torres y casas fuertes de El Campo (Caso), Orlé (Caso y Orlé) y Los Cobos (Caso de los Cobos), todas ellas desaparecidas, mantenían su influencia. Había también propiedades monacales, pero el concejo gozó siempre de una intensa vida independiente, regulada por sabias ordenanzas locales transmitidas "desde inmemorial tiempo, a son de campana tañida". La prevalencia del derecho consuetudinario.

Mas abajo, en dirección a la capital, a fines del siglo XIII, entorno a 1280, el rey Alfonso X el Sabio otorgó una carta de población a Laviana. La Pola de Laviana tendría un fuero, al estilo del de Benavente y aunque no se conserva, sirvió sin duda para conformar el espacio y dotarlo con nuevos moradores y algunos servicios urbanos como ayuntamiento, Iglesia y mercado. Una especie de ordenación del territorio, promoción económica y un cartulario en materia de repoblación.

Unas décadas después la presión vecinal y la iniciativa de promoción económica del señorío episcopal instituyó una nueva puebla, la Puebla de la Puente de Oturiellos, en Langreo. Allí donde el río formaba una vega y había un puente muy preciso para la comunicación. En el lugar bajo advocación de la patrona de Asturias, Santa Eulalia, se creó la puebla que daba sentido a la de Laviana, al no dejarla aislada.

Al igual que con la perdida de Pola de Laviana, la de Langreo sigue el modelo del Fuero de Benavente. Una serie de vecinos, comisionados por los reunidos en La Puente de Oturiellos solicitan en abril de 1338 al obispado la concesión de una carta para establecer puebla, y en junio el obispo don Juan la concede "en el lugar que ellos elijan"; delimita su alfoz o territorio, les exime de diversas prestaciones, regula cómo han de elegir a los oficios para organizar el territorio y las obligaciones que deben cumplir con el cabildo.  Estos interesantísimos documentos, copiados en los hermosos "Libro de los Privilegios" y el "Libro de la Regla Colorada" del archivo de la Catedral  han sido publicados por el Ayuntamiento de Langreo hace años.

Años después, en 1344, en enero Alfonso XI, a petición de sus hijos Enrique y Fadrique, gobernadores de las tierras de Sobrescobio, de la orden de Santiago, piden se haga puebla en Oviñana, también siguiendo el patrón de las otras. Desgraciadamente tampoco se conserva el original, pero sí una confirmación realizada por los Reyes Católicos en Valladolid, en 1484.

Las pueblas ofrecían seguridad jurídica a sus moradores. Estos sabían lo que tenían que pagar, cómo recaudarlo y a quién entregarlo; tenían su documento de vecindad que les facilitaba moverse y ejercer ciertos derechos. Podían elegir cargos que organizaran la vida económica y social: alguaciles, jueces y alcaldes que se ocuparan de dirimir los conflictos, cuidaran la seguridad, la reparación de caminos y puentes, organizaran ferias y fiestas; en definitiva promovieran la riqueza territorial.

Las tres pueblas contribuyeron a la organización del territorio y promovieron una suerte de economías complementarias. Se fueron creando pequeños villorios sobre el valle, mas activos desde Pola de Laviana a Langreo, camino de la capital, Oviedo. La puebla de Oviñana, punto de arranque de la alta montaña, hacia el sureste hacia Tarna, tenía un carácter menos activo. El territorio de Sobrescobio y Caso, con poderosos señoríos laicos, de órdenes y monacales sobresalieron en pastos de montaña, caza, pesca y control fronterizo.

Aguas abajo, el valle ofrecía algunos espacios más amplios aprovechados para establecer poblaciones más estables y cierta vida en pequeños pueblos, que no alcanzarán carácter urbano hasta la industrialización, pero que ya sirven para articular el territorio.

Imagen: el maravilloso «Libro de los testamentos» de la Catedral de Oviedo, mandado hacer por el Obispo Pelayo, en el siglo XII, para inscribir los bienes donados (algunas donaciones un tanto inventadas) a la Catedral por reyes y nobles ha sido reproducido en facsímil. Contiene espectaculares miniaturas.

Recorrer mi Valle. VIGILAR EL CAMINO. Las torres.

En dirección al pasado.
VIGILAR EL VALLE. Las torres. 

Aunque remodeladas en épocas posteriores y reutilizadas para otros menesteres, desde el medievo varias TORRES sirvieron para mantener la buena comunicación entre los habitantes del Valle en este nuestro tramo y mantener a raya a los enemigos o hacer más lenta su incursión. Hubo más, sin duda en los cruces del río, en los peñas de La Oscura o en La Cabezada en Blimea donde está documentada la existencia de un castillo; o río arriba en Caso habría instalaciones de vigilancia al estilo de torreones. Hoy, que se puedan ver como testigos del pasado, quedan en pie, a veces malheridas por el abandono, estas cuatro que describimos.
LA TORRE DE VILLA en Riaño. Forma parte del conjunto del palacio de Camposagrado, ahora separada de él por la vieja carretera. Es cuadrada, de buena mampostería y tiene tres pisos, con acceso actual por el segundo. El piso bajo está abierto con arquerías. Los estudios previos a su declaración BIC (en 1995) concluyeron que podría datarse en el XVI y que siempre perteneció a los dominios de los Bernaldo de Quirós (los que se vanagloriaban de su poderío con aquel "después de Dios la casa de Quirós"). Remodelada en varias ocasiones, aunque la situación actual no parezca ofrecer carácter defensivo, si imaginamos el río donde estaba antes de su cambio y la colocamos integrada en las tierras del marquesado, si debía ejercer un cierto control sobre el Valle y las propiedades nobiliarias. Hoy arruinada, queda casi oculta tras el polígono industrial. Merece una reparación. ´
Muy cerca aún queda algo de la TORRE DE LOS RIAÑO dentro de la propiedad que luego fue de los Dorado.
LA TORRE Y CASA DE LA QUINTANA en Ciaño. El rico pasado histórico de Ciaño como centro de poder nobiliario hasta fin de la modernidad, queda atestiguado por varios restos. Hoy va de torres. La torre de la Quintana, adosada por un pasadizo con la casona del mismo nombre, es circular y de casi 13 metros de altura. Muy remodelada en 1540 por el Prior Solís, el potentado de la dinastía, había sido edificada a mediados del siglo XIV poco después de la constitución de la Pola de la Ponte de Oturiellos y formaría parte de un intento de dar seguridad al camino principal del Valle. Tiene tres pisos; al primero se accede por el pasadizo y en lo alto hay dos ventanas geminadas a este y oeste. La cubierta es cónica. Restaurada y sin el muro que rodeaba la propiedad hasta hace unas décadas ofrece un buen aspecto, aunque su carácter de vigía aparece desvirtuado porque la próxima construcción industrial y las altas construcciones la hacen parecer menos importantes; pero en un tiempo de casuchas diseminadas de campesinos solo ella, la iglesia (cuyo pórtico es del XIII) y algunas casonas ofrecerían aspecto de poderío. La declaración BIC vino a asegurar su conservación. 
EL TORREÓN, EL CONDADO, LAVIANA. Es el mejor ejemplo de arquitectura militar. Probablemente fue construida en siglos altomedievales, pero lo más antiguo actual es del XIV. Encaramada sobre un espolón calizo, no precisa fosos y esta claro que fue utilizada para vigilar la importante vía de comunicación que daba salida al valle del Nalón hacia Castilla por el puerto de Tarna. Es rectangular, tiene tres plantas y está edificada con mampostería y sillería de arenisca. Se accede por la primera planta y en su origen es posible estuviera coronada por almenas. En el siglo XIX se derrumbó parte. En la guerra civil fue reutilizada y entre los 50 y 60 del pasado siglo, los propietarios realizaron una restauración calificada como poco afortunada al introducir cemento y hormigón y colocar su propio escudo. El decreto que en 1994 declaraba al Torreón Bien de Interés Cultural (BIC) denunciaba este mal trato a un bien de tanta importancia histórica y estratégica.
EL TORREXON DE SOBRESCOBIO. Avanzan muchos estudios que más que torreón fue en sus buenos tiempos un castillo habitado habitualmente y que procedía de una construcción romana. Los restos que hoy se ven sobre la roca (escobio) que domina un estrecho del Valle del Nalón en la actual presa dio nombre al concejo. Sobrescobio (sobre un escobio). El Torreón/castillo vigía fue en la Edad Media, en el siglo XII entregado por Fernando II a la poderosa orden de Santiago. El castillo de Villamorey, como también se le conoce, debió ejercer de freno a invasiones. De la musulmana queda el topónimo próximo Villamorey. Luego este lugar fue utilizado por nobles ligados a la realeza que controlaban el territorio. La constitución de la puebla de Oviñana en el siglo XIV, en sintonía con otras las otras del valle, vino a darle a este torreón carácter de vigilancia del camino de comunicación hacia Tarna.
Una ruta entre Villamorey y el torreón permite comprender la importancia estratégica de una construcción que fue reutilizada siempre que hubo guerras o problemas entre bandos. Una ocupación que entró en decadencia pero que merece un gran respeto.
Foto: torre de Villa